¡Video muestra a él sospecho sentándose para ver a la mujer quemarse viva!
Los ciudadanos de Nueva York quedaron horrorizados tras un terrible incidente en el que una mujer fue quemada viva mientras esperaba en el metro subterráneo. La víctima, identificada como Debrina Kawam, de 57 años, se había quedado dormida en el metro mientras intentaba llegar a su hogar en Toms River, Nueva Jersey. Según las autoridades, el metro se detuvo en una estación en Coney Island, Brooklyn, la mañana del 22 de diciembre, cuando un hombre prendió fuego la ropa de Kawam.
El hombre, identificado como Sebastián Zapeta, avivó las llamas con su camisa para aumentar su intensidad. Kawam quedó completamente envuelta por el fuego y murió quemada. Según el informe policial, Zapeta se sentó en un banco de la plataforma cercana y observó cómo Kawam era consumida por las llamas. La policía inició una investigación circulando imágenes de vigilancia del sospechoso cometiendo el crimen. Zapeta fue arrestado después de que un grupo de estudiantes de secundaria informará a la policía sobre la identidad del hombre en las imágenes.
Las autoridades aún no han determinado el motivo del asesinato. Los fiscales revelaron que, aunque Zapeta admitió ser el hombre en el video de vigilancia, afirmó no recordar el crimen, probablemente debido a estar intoxicado. Funcionarios federales de inmigración confirmaron que Zapeta es originario de Guatemala y que ingresó ilegalmente al país. La dirección de Zapeta coincidía con un refugio que proporciona vivienda a personas sin hogar y apoyo para el abuso de sustancias.
Informes también sugieren que Kawam se encontraba en un refugio local para personas sin hogar y que su dirección en Nueva Jersey podría ser antigua y ya no residía allí. No está claro si existía una relación previa entre Kawam y Zapeta, o si fue un asesinato premeditado. La identificación de Kawam fue un desafío debido a las graves quemaduras en su cuerpo, lo que obligó a los investigadores a usar pruebas forenses y videos de vigilancia para rastrearla.
Zapeta se encuentra actualmente encarcelado y enfrenta cargos de asesinato e incendio provocado. La primera audiencia se llevó a cabo el 7 de enero en un tribunal de Nueva York. Cuando se le pidió comentar sobre el caso, el abogado de Zapeta se negó a responder preguntas fuera de la sala del tribunal, aunque los registros judiciales revelaron que Zapeta no ha llegado a un acuerdo de culpabilidad.
Este trágico incidente pone en evidencia los problemas que pueden surgir debido a políticas fallidas de control fronterizo. Zapeta tiene un historial claro de abuso de sustancias y vivía en las calles de Nueva York, sin evidencia de que estuviera trabajando o contribuyendo a la sociedad.
Este no es el primer caso en el que un inmigrante ilegal comete un asesinato contra un ciudadano estadounidense. Hace solo unos meses, un tribunal de Georgia sentenció a José Antonio Ibarra, un inmigrante ilegal, por el asesinato de la estudiante de enfermería Lankan Riley, quien fue violada y asesinada mientras salía a correr. Si no se toman medidas para reforzar la reforma migratoria, es solo cuestión de tiempo antes de que ocurra otro crimen similar.