El Concejo Municipal endurece las reglas ante el aumento de apuestas ilegales, ventas no autorizadas de cannabis y explotación de vacíos legales.
Funcionarios de la ciudad de Anaheim están tomando medidas urgentes para frenar la expansión de actividades ilegales vinculadas a las tiendas de humo, una consecuencia de años de supervisión laxa y leyes de zonificación permisivas que permitieron que estos negocios proliferaran con mínima regulación.
Recientemente, el Concejo Municipal de Anaheim aprobó por unanimidad una ordenanza que exige a los propietarios de tiendas de humo obtener un permiso minorista de tabaco, establece nuevos límites de proximidad a escuelas y parques, y otorga a la policía la autoridad para inspeccionar los locales y sancionar a los infractores.
La ordenanza surge en medio de una creciente preocupación de parte de funcionarios del Departamento de Policía de Anaheim, quienes afirman que muchas de las 78 tiendas de humo de la ciudad se han convertido en centros de ventas de marihuana del mercado negro y operaciones de apuestas ilegales, a menudo ocultas detrás de muros falsos o habitaciones traseras.
El sargento de policía de Anaheim, Chris Cooper, explicó que la falta de requisitos de licencias y la mínima supervisión crearon un vacío regulatorio que atrajo operaciones criminales. Según Cooper, los delincuentes estaban explotando una laguna causada por la falta de controles en los negocios para adultos.
El problema tampoco está aislado en un solo vecindario. Si bien el Distrito 2, que incluye Brookhurst Street y Little Arabia, tiene la mayor concentración de tiendas de humo (31 de las 78 de la ciudad), Cooper enfatizó que el problema es a nivel estatal en California.
En respuesta, el concejal Carlos León, quien representa parte del oeste de Anaheim, apoyó la ordenanza y la calificó como una medida necesaria para abordar el aumento de quejas de seguridad pública en su distrito.
Según analistas, el enfoque permisivo de Anaheim hacia las tiendas de humo fue moldeado por la inacción política y leyes de zonificación obsoletas que no requerían que los operadores obtuvieran permisos específicos ni se sometieran a inspecciones significativas.
Eso permitió que muchos operaran sin ser examinados, un hecho que la policía dice que envalentonó a los operadores para realizar actividades ilegales a puertas cerradas.
Hasta ahora, las tiendas de humo no necesitaban una licencia de venta de tabaco, y podían abrir cerca de escuelas, parques y otras áreas sensibles con pocas restricciones. La ley estatal exige licencias para dispensarios de cannabis, pero las tiendas de humo no relacionadas con cannabis a menudo han existido en una zona gris, escapando al mismo escrutinio.
Cooper reconoció que no todas las tiendas de humo están violando la ley. De hecho, muchos negocios legítimos dan la bienvenida a las nuevas reglas, diciendo que nivelarán el campo de juego.
Sin embargo, la nueva ordenanza, que entrará en vigor el 1 de enero de 2026, impondrá leyes mucho más estrictas sobre la industria. La ordenanza incluye disposiciones clave como requerir que las tiendas obtengan un permiso de venta de tabaco si el 15% o más de su inventario visible está dedicado al tabaco o parafernalia relacionada. Las nuevas tiendas de humo también deben estar al menos a 1,000 pies de escuelas, parques y centros comunitarios, y a 500 pies de otras tiendas de humo. La ordenanza también permite a la policía de Anaheim realizar inspecciones sin previo aviso y hacer cumplir el cumplimiento, sin embargo, los salones de cigarros y las licorerías estarán exentos de las nuevas reglas.
Las violaciones a la nueva ordenanza también serán más severas, con una primera violación resultando en una suspensión del permiso por 10 días hábiles con una multa de $250, una suspensión de 30 días y una multa de $500 por una segunda violación, y una revocación del permiso por dos años más una multa de $1,000 por una tercera infracción.
Los concejales también debatieron sobre incluir una prohibición sobre el óxido nitroso (también conocido como whippets), que también se vende con frecuencia en las tiendas de humo. Sin embargo, Cooper advirtió en contra de enfocar el castigo solo en un tipo de tienda.
Ciudades cercanas, incluida Santa Ana, se han movido recientemente para prohibir por completo la venta recreativa de óxido nitroso.
Partidarios de la ordenanza, como el jefe de policía de Anaheim, Rick Armendariz, elogiaron la regulación como una herramienta muy necesaria. Pero algunos defensores comunitarios advierten que sin una aplicación constante y apoyo a los negocios pequeños legítimos, la ciudad podría estar tratando solo los síntomas — no las causas raíz — del problema.
